viernes, 15 de marzo de 2019

Paolo Pullicino, el padre de la educación en Malta VOL.I




La educación de adultos no se introduciría en Malta tras 50 años de la abolición de las reformas educativas francesas, junto con las fuerzas de Napoleón, en 1800. Esta demora no fue tanto porque los administradores británicos (que tomaron el relevo de la administración francesa) no se molestaron, se debió más a la indecisión a causa del conflicto no resuelto entre los frentes lingüísticos del italiano, el inglés y el maltés. Esta demora de 50 años, durante los primeros años del siglo XIX marcó uno de los peores períodos de pobreza en Malta, cuando muchas personas no tenían trabajo ni comida y solo las aceras para dormir.

Paolo Pullicino (15-8-1815 a 13-5-1890 enterrado en la catedral de Mdina) el hermano mayor del juez Filippo, fue el maltés que finalizó con este punto muerto, convirtiéndose en el padre de la educación maltesa. Era un hombre altamente educado, se había graduado en la Universidad de Malta, luego asistió a la Universidad La Sapienza en Roma y finalmente estudió en la Sorbona en París. Probablemente fue la influencia de la Sorbona la que encendió el sueño francés de Égalité des genres dans l´éducation et par l'éducation. Es interesante conocer que se apoyó en los estudios de un académico en la sede francesa de aprendizaje en París para establecer los ideales educativos de la revolución en Malta, en lugar del dictado por las fuerzas conquistadoras de Napoleón. A pesar de ser un sacerdote ordenado, que se convirtió en Monseñor y Canónigo, fue designado por la administración británica como Ministro de Educación e impulsó estas ideas.

En 1850, Paolo Pullicino creó la primera Scuola Serale o escuela nocturna para adultos, en Zabbar. Esta estrategia educativa parecía ser un esfuerzo conjunto entre la Iglesia y la Administración británica, quienes compartían un objetivo común de educación: la Iglesia educa en religión y el gobierno en inglés. Las primeras lecciones comenzaron en aritmética, lectura y escritura. Pullicino, con su creencia en la educación para todos y su capacidad para comunicarse con los administradores británicos, la Iglesia y la agrupación italiana, estaba bien situado. También usó sus conexiones con la Iglesia para anunciar los beneficios de estas clases nocturnas en los servicios dominicales en todas las parroquias.

Paolo Pullicino fue el primer maltés en alentar a las masas a continuar su educación. PJ Keenan, en su informe de la comisión de 1878, escribió: "El logro en el espacio de 30 años se debe al crédito de un hombre, Pullicino. En toda mi experiencia, en mi país y en el extranjero, de hombres cuyas vidas han estado dedicadas a Educación, no he conocido ni oído hablar de ningún hombre que combinara en un grado tan interesante las cualidades de incesante dedicación al deber y de una búsqueda ferviente y entusiasta de su propio ideal de lo que es mejor. Ningún hombre podría revisar la vida oficial del Dr. Pullicino sin recibir una admiración casi inexpresable de su industria paciente y de su enorme capacidad ".

Las escuelas que estableció Paolo Pullicino crecieron, y de una forma u otra todavía existen en la actualidad. Además de abrir las escuelas, estableció el plan de estudios y formó personalmente a los maestros. Por lo tanto, los idiomas inglés y maltés recibieron más exposición bajo este nuevo sistema.

Muchas personas en Malta habían sufrido desventajas y opresión debido a la falta de educación, que había sido tan difícil de abordar. Fue una patata caliente de la alta política, que sigue siendo un problema hoy en día. Dos facciones culturales trabajaban para ganar la mente de la gente. Por un lado, estaban los anti-reformistas que promovían el italiano: este era el lenguaje tradicional de la élite y de la sociedad civil, o la red de instituciones ideológicas y legales dominantes que unían el tejido de la sociedad y apoyaban la hegemonía existente (Administración / Iglesia / Nobleza). Por otro lado, estaban los administradores británicos que obviamente promovían el inglés.

También había un número creciente que exigía más uso y representación de la lengua nativa, el maltés. Este conflicto italiano-inglés-maltés retrasó el establecimiento de un sistema educativo dirigido a la ciudadanía. Las distintas autoridades no pudieron ponerse de acuerdo sobre el contenido de la educación, por lo que una bloqueó a la otra y simplemente no sucedió. El debate sobre el idioma se complicó aún más por el hecho de que la Iglesia todavía escribía, hablaba y mantenía sus servicios religiosos en latín. También existía el indígena maltés, que tenía muy poco que decir: el maltés era, según algunos administradores en ese momento, solo "un idioma apropiado para la cocina".

Fue en este complejo contexto político que Paolo Pullicino impulsó el establecimiento de las primeras escuelas comunes. Pacificó el bando italiano, cubrió las necesidades de la Iglesia, añadió la lengua inglesa y representó los intereses de Malta al incluir también su idioma, que estaba escrito con el alfabeto italiano. De este modo, una vez reunidas las facciones se pudo establecer una base de apoyo educativo. Esta etapa marcó el comienzo de la ascendencia del inglés en detrimento del italiano y, finalmente, le dio al maltés las muchas ventajas que ofrecía este idioma mundial, más que si el italiano hubiera sido el idioma dominante. 

También se debió a Paolo Pullicino que el maltés comenzara a usarse en un contexto de enseñanza, ya que la mayoría de los cursos tenían algunos conceptos básicos en maltés. Esto inició el inicio del maltés como un lenguaje seriamente enseñado, escrito y leído que se utilizó en la educación. El idioma maltés también comenzó lentamente a reemplazar el italiano en los tribunales de justicia y más tarde en los ministerios. El maltés en 1924, cambiaría su alfabeto del italiano al propio, pero lo principal era que a la gente se le enseñaba en el maltés que entendían.

Paolo Pullicino provenía de una familia que tenía la búsqueda del bienestar cívico arraigada en sus valores, nunca podría haber anticipado que sus esfuerzos educativos darían lugar a que una de sus descendientes se convirtiera en la primera representante femenina del Partido Nacionalista solo tres generaciones después. Dos generaciones después de Paolo, también tuvieron al Fiscal General Sir Philip Pullicino.

Fueron personas firmes y confiables como estas las que, lentamente, fueron esenciales en la configuración de la infraestructura educativa y social. Aunque se lograron avances en educación, salud y riqueza, las estructuras de poder establecidas estaban protegidas por aquellos a quienes servían. Un cambio radical hacia la igualdad en el equilibrio de la sociedad no se produciría hasta que la democracia política se estableciera sobre esta base educativa. Eso no sería hasta casi un siglo después.

El sistema educativo de Malta es la base del desarrollo social, económico y político actual.

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